29 Oct LA CALAVERA

La calavera es un motivo muy frecuente en la Historia del Arte. Es el icono del Hamlet dubitativo de Shakespeare en literatura, en el Dies Irae o la Danza Macabra en música, aparece constantemente en los gratifis de todos los tiempos, en el cómic moderno, en las insignias y tatuajes, fue el símbolo de famosas banderas de piratas, de sectas, de culturas fascinadas por la muerte…

En la pintura religiosa de inspiración cristiana la calavera adquiere un significado especial como símbolo, advertencia y realidad última del ser humano y sus vanidades; se asocia a la meditación, al ascetismo o a la apocalíptico en general. 

Aparte de tales connotaciones, la calavera como estructura siempre me ha parecido un elemento pictórico de primer orden que he incluido en mis cuadros-sin renunciar a los significados que la historia le ha añadido- sobre todo por sus valores formales: arquitectura, volumen, colorido, efecto expresivo, etc. 

Aprovechando la proximidad de las fechas en las que la muerte está tan presente en nuestra sociedad y se celebra con fiestas como “días de difuntos”, afluencias a los cementerios, carnavales de Halloween y actos en los que se la transforma en máscara, en caricatura y en definitiva en arte, he querido mostrar aquí alguno de mis cuadros en los que la calavera es parte esencial de la obra.